El cerebro límbico se encarga de la gestualidad y no sabe mentir
No se puede impostar la gestualidad.
Por mucho que yo quiera enseñar a alguien a vender un producto, si no cree en él, toda la gestualidad que tenga le delatará.
¿Y por qué ocurre esto? Porque el encargado de la gestualidad es el mismo que se encarga de gestionar las emociones, el sistema límbico o cerebro límbico, y al igual que eres perfectamente consciente de cuándo alguien, por mucho que la quiera negar, tiene una emoción desagradable porque su sistema límbico la deja ver, tu gestualidad también será visible.
Y de nuevo, ¿por qué ocurre esto? Porque tu cerebro límbico no sabe mentir. Si tienes malestar, lo mostrará y lo hará tanto a nivel emocional como a nivel gestual.
Tu cuerpo siempre va a mostrar lo que tu boca calla.
En cierto modo, esto delata la falta de asertividad que tiene el ser humano, cada vez más marcada, que le impide solucionar una situación y como vía de acción opta por una actitud totalmente egoica, eligiendo la complacencia, la mentira (mentira piadosa), el control o la manipulación.
Piensa en las cosas que te han ido pasando y revisa cual ha sido la ultima vez que quisiste decir no pero dijiste sí y piensa en cómo fue tu reacción, lo más probable es que no te acuerdes de tu gestualidad, pero seguro que la hubo.
De hecho a veces es una auténtica pena no tener una cámara que nos vaya grabando para ver nuestras reacciones.
Esta mañana, sin ir más lejos, yendo al trabajo, en un tramo de la autopista estaba puesto un radar de control de la policía, un coche venía por el carril izquierdo superando por bastante la velocidad permitida en la zona y se ha visto obligado a pegar un frenazo para evitar la posible multa, cosa que no sé si habrá conseguido puesto que la reacción ha sido tarde y al pasar por delante aún superaba los límites de velocidad. ¿Cómo lo sé? porque al pasar por al lado del control nos hemos puesto los coches en paralelo y a mirar al conductor del vehículo se le ha escapado un gesto de problema: Se ha pinzado la nariz con pulgar e índice, la lectura que damos a este gesto es "percibo un problema", algo totalmente coherente con la situación, pero a falta de palabras, su propio diálogo interno ha salido en forma de gestualidad.
De la misma forma cuando nos relacionamos y no decimos lo que pensamos, nuestra no verbalidad sale en modo de gestualidad, conocerla da mucha información pero también habla de nuestros miedos o carencias o de las incongruencias entre lo que decimos y sentimos.
Un ejercicio que podemos hacer, sobre todos para aquellos que en esta era de desinformación y de control a través del miedo sean más sugestionables, o quieran profundizar un poco más, es utilizar el sentido común y mirar, observar y analizar si eso que nos cuentan va unido a la emoción adecuada, y si la gestualidad afirma o rechaza lo que se está diciendo.
Si quieres saber un poco más sobre gestualidad y su significado no dejes de ponerte en contacto con nosotros.