¿Vas a privarte de conocerte?

blog image

No solemos dejarnos ver en esencia, por diferentes motivaciones.

"Con cuántas personas estamos y con qué pocas somos"


Cuando leí este texto de Carlos Miguel Cortés me impactó y desde entonces no ha dejado de tocarme, de remover algo por dentro.


Ya sea por querer controlar, por buscar validación o por tender a centrarnos más en los pensamientos, no solemos dejarnos ver en esencia.

Casi siempre interpretamos un papel y generalmente lo podemos ir cambiando en base a con quién no relacionemos. Nos presentamos con distintos tipos de máscaras que ocultan nuestra verdadera esencia.


La idea base por lo que lo hacemos puede variar: no soy lo suficientemente bueno y si me muestro lo vas a utilizar en mi contra; me voy a hacer vulnerable, van a pensar que soy débil; no voy a gustar por lo que soy y necesito otro escaparate que mostrar; van a notar mis inseguridades y me harán daño... Vamos a encontrar un montón de razones para dejar de ser nosotros mismos y desarrollar un personaje que modelaremos en base a con quien estamos.

Y esta situación se repite y se repite, en uno y en otro.


Las personas creamos avatares en Facebook, en Tick Tock o en el metaverso pero lo hacemos exactamente igual que en la vida real a través de nuestras máscaras.

Aparentamos, fingimos, nos hacemos los interesantes, los duros, lo único que sólo podemos cambiar en la vida real, en parte, es nuestro aspecto físico, no como en las plataformas donde el filtro hace el trabajo por nosotros.


¿Por qué hacemos esto?


Generalmente esta relacionado con la supervivencia.

Desde pequeños hemos aprendido a desarrollar estrategias defensivas enfocadas a sobrevivir y a que nos presten atención, al ser y sentirnos completamente dependientes. Y dado que dichas herramientas nos dan algún tipo de beneficio o así creemos entenderlo, las mantenemos "porque para qué cambiar si esto es lo que gusta de mí", o al menos así lo interpreto.

Nuestro cerebro está más preparado para sobrevivir que para vivir, así que siempre que considere que nuestra exposición es un peligro, nos animará a actuar para evitarlo.


Nos importa demasiado lo que ocurre fuera, como para dedicarnos el tiempo necesario para nosotros y ese suele ser nuestro error más grave.


Nos mostramos como padres a los que les cuesta mostrar amor o fragilidad, como parejas fuertes que no necesitan apoyo, reconforte o donde cualquier muestra emocional está mal vista... y todo esto nos lo perdemos, el amor, la compasión, la sensibilidad, la verdad...


Sólo cuando decidimos mostrarnos aparece nuestra verdadera fortaleza, somos conscientes de nosotros mismos y entendemos que nuestra felicidad depende exclusivamente de nosotros.


Cada uno de nosotros es único y especial.


¿Vas a privarte de conocerte? ¿Vas a privarnos de conocerte?