El valor de una opinión

blog image

El problema no son los comentarios en sí mismos, sino la relación que tienes con ellos.

Uno de los puntos esenciales para poder mantener la autoestima es

NO TENER EN CUENTA LO QUE DICEN LOS DEMÁS


Esto no quiere decir, ni tiene nada que ver con el hecho de que las otras personas no puedan hablar, de hecho pueden opinar, tienen todo derecho a hacerlo, pero debemos tener cuidado con esas opiniones tanto si son positivas como si son negativas, sobre todo con el valor que nosotros mismos les damos sin cuestionarnos el por qué o desde qué condicionamientos vienen.


Es más, quizá debas tener más cuidado cuando se trate de comentarios positivos ya que al generarnos placer, emoción de alegría cuya plataforma de acción invita a permanecer en el lugar, mantenimiento de acción..., nos desequilibra desde una presunta normalidad, en cambio el comentario negativo lo vemos venir y tendemos a relativizar algo más.


Aún así es importante tener en cuenta que tanto uno como el otro, positivo o negativo, provienen de la propia percepción de la realidad que hace la persona que lo realiza, más concretamente de la experiencia de esa persona con nosotros. Es por esto que hasta cierto punto sea normal (siempre entendiendo el mapa del otro) que pueda llegar a tener un concepto negativo de nuestra persona si cuando se ha relacionado con nosotros (trabajo, clases...) no ha conseguido lo que esperaba (expectativas), del mismo modo que es normal que nos considere maravillosos cuando logra, gracias a nuestra colaboración, el objetivo que se había marcado.


Volver a recordar que


Tu autoestima proviene de ti mismo, no hay que buscarla fuera, no hay que reforzarla con comentarios o valoración externa, sino con la valoración personal y darte cuenta que sólo teniendo una percepción clara de la realidad serás capaz de ponerte en valor, dejando al margen la aprobación de los demás o las críticas.


El problema no son los comentarios en sí mismos, sino la relación que tienes con ellos.