Para mejorar te tienes que hacer responsable

Solo se pueden cambiar las cosas cuando tienes conocimiento de lo que hay que cambiar.

Si tienes humedad en el techo de tu habitación, pero no lo sabes, no podrás arreglarlo por mucha señales que otros puedan percibir. Con nosotros es exactamente igual, podemos tener una serie de hábitos, creencias, conductas que no son beneficiosas para nosotros, pero no somos conscientes de ello y por lo tanto continuamos practicando eso que tanto daño nos hace. Tenemos la fea costumbre de proyectar sobre los demás aquello que nos molesta de nosotros y lo hacemos con la intención de hacernos daño a nosotros mismos. Puede ser a través de personas, situaciones o incluso podemos hacerlo a través de nuestro propio dolor físico, pero no somos conscientes .

Proyectamos, interferimos, nos emocionamos en base a eso que hayamos hecho y sufrimos las consecuencias. Actuamos con el piloto automático, como si no tuviéramos la capacidad de darnos cuenta de las cosas, la consciencia brilla por su ausencia. Y es que es más fácil la actitud de ego, victimización, quejarse, querer tener razón... para que de alguna forma no nos hagamos responsable de lo que nos pasa.

Ahora, a todo le ponemos # y para todo buscamos un medicamento.

• No duermo bien,¿ para que me voy a molestar en buscar el motivo? ¿Igual debería bajar el ritmo, cenar menos, hacer más ejercicio o meditar? No, es mejor tomar una pastilla.
• Que he cogido algo de peso.¿ igual debería vigilar la alimentación, hacer más ejercicio o aprender a aburrirme? Pero no, nuevamente es mejor buscar alguna alternativa externa.

Así podríamos continuar con todo, trabajo, relaciones personales, familia, etc…

Podemos, como nos han enseñado, buscar culpables fuera o podemos hacernos responsables.. Si decides lo segundo tendrás un camino en el que el autoconocimiento es vital, así localizarás “ las humedades” que tienes que reparar. A partir de ese momento, ya es tu responsabilidad solucionarlo o no, pero una cosa es segura, tu forma de percibir la realidad habrá cambiado y si eso cambia, todo cambia.

• Encontrar-TE va a ser una grata sorpresa
• Trabajar-TE te exigirá una esfuerzo
• Vivir-TE no tendrá precio

Cambia tu forma de percibir, cambia tu realidad.

Proceso Origami